Fácil: el propio nativo, quien nació a esa hora en ese lugar y tal día… a condición de que no se crea a ninguna cultura que trate de convencerlo de que es un esclavo de los astros. Y eso sí que no es fácil.

Teniendo presente el mito de Isis y Osiris, por el cual LA VERDAD ESTÁ DISEMINADA POR EL MUNDO, es decir no es nunca exclusiva de un lugar y su creencia cultural asociada, nuestra vida se transforma en una constante búsqueda para ir recomponiendo la TOTALIDAD a partir de las partes que vayamos encontrando (como explica el cuento del Elefante en la Oscuridad), con tal de resistirnos firmemente a tragar lo que tratan de inculcarnos,… como dice el viejo refrán castellano “Comulgar con ruedas de molino”.

La humanidad ha dado muchos maestros y otros tantos rebeldes desde Sócrates y probablemente mucho antes. Por ejemplo, Buda no respondió a la pregunta de sus discípulos sobre si existe el destino, como a muchas otras.

Muchas corrientes del sufismo abogan por esa búsqueda que emana del cuento del elefante. Le preguntaron a Rumi acerca del destino y se limitó a reproducir uno de los aforismos más populares del Mulá Nasrudin, aquel del condenado a muerte que ven llevado hacia la hora. ¿Lo conocen verdad?

Con el tiempo, la voluntad y el trabajo bien dirigido podemos hacer sonar cada componente de la orquesta (Del Sol a Plutón) según necesitemos en cada momento.

Juan Trigo

Mayio 2023