
Hace días de forma fortuita di en las RRSS con el escaneado de la primera novela que me publicaron, Desierto de Niebla y Cenizas. Un evento entrañable para mí porque supuso la primera experiencia editorial a mis 33 años desde que a mis 15 años completé mi primera novela para llevarla a la crítica y comencé el via crucis. Y además gracias a esta publicación conocí a mi maestro, Emilio Salas, porque él era el director de colección de la Editorial Martínez Roca y al leer mi original le llamó la atención el que yo mencionara la llamada “Cuartila del Fin del Mundo” de Nostradamus.
Vale decir que actuó como los grandes editores de los EUA, es decir, me sugirió reescribir el original porque lo había escrito en modo Camilo José Cela, o sea sin separación de párrafos, por punto y aparte, sin separación por capítulos e incluso sin puntos-y-seguido. Cosa que solo podía hacer nuestro Premio Nobel de Literatura porque, aunque no se podía leer, comprábamos sus libros disciplinadamente. Y así fue como a lo largo de meses de trabajo, prueba y error, me salió por fin un texto legible y vi por primera vez una de mis novelas publicada.
Añadiré que con esta novela quedé entre los seleccionados para la final del Premio Planeta en 1975, y como solamente publican el finalista y el segundo clasificado, empecé lo que llamé anteriormente el vía crucis en busca de editor, hasta que di con Emilio Salas.
Espero que os pueda interesar su lectura.
Juan Trigo
Enero 2023